Hoy es el día para dejar de dudar y estresarse. Las cosas todavía no se han alineado. Pero lo harán, si haces la tarea y sabes exactamente lo que estás buscando.
1 – Estas seguro de lo que quieres
Puedes pensar que quieres ser un inversionista, pero ¿investigaste y entendiste completamente el compromiso y el tiempo necesario para tener éxito en esa industria? Un inversionista puede trabajar unas 100 horas en una semana.
Si no te apasiona tanto como para pasar todo tu tiempo haciéndolo, o si simplemente disfrutas del tiempo de inactividad el fin de semana, esta carrera puede no ser para vos. Y eso está bien. Porque saber lo que no quieres es la mitad de la batalla.
Conocer las opciones pertinentes a los trabajos, combinados con saber lo que quieres en la vida, es la fórmula para encontrar el trabajo de tus sueños.
2 – Comprende el mercado (y lo que traes a él)
Comprender el mercado en el que estás tratando de ingresar es vital para encontrar el trabajo de tus sueños.
Imagina que está entrando en un campo que está saturado en este momento, pero sabes que esta área es la combinación perfecta para vos. ¿Qué puedes aportar a una organización que te diferencie de la competencia? ¿Qué hará que tu currículum se destaque entre los otros? ¿Hay cosas que hayas hecho en el pasado que puedan vincularse con esta futura carrera?
3 – Red de contactos
Existen muchas opciones sobre cómo conectarse cuando intentas encontrar el trabajo de tus sueños. LinkedIn es una gran herramienta para construir relaciones con personas a las que normalmente no tiene acceso y te permite la simplicidad de conectarse de una manera menos directa y personal.
Si eres más extrovertido y prefieres reunirte con personas cara a cara, considera asistir a ferias, eventos y congresos que se centren en las industrias en las que buscas empleo. Consulta on line los próximos eventos y preparate para distribuir ese currículum.
4 – Solicita el empleo
Seamos realistas, solicitar un trabajo puede ser una tarea desalentadora que nos deja expuestos. Tomar medidas es a veces la parte más difícil. Puede que nunca parezca el momento “correcto” y va a haber cierto nivel de miedo porque estás a punto de mostrarte. Pero conoces tus habilidades y lo que eres capaz de hacer. Ya investigaste el mercado, sabes lo que quieres y lo que no. ¡Adelante!
5 – Haz una evaluación
Puedes saber lo que te gusta y lo que no, pero ¿sabes por qué te sientes así? Hacer una evaluación puede darte una comprensión más profunda de tu estilo de comportamiento, evaluaciones como DISC por ejemplo. Saber más acerca de cómo trabajas mejor y qué te motiva puede ayudarte a afinar tu búsqueda de trabajo y tratar de encontrar la oportunidad perfecta.
Conclusión
Los entrevistadores notarán la confianza en ti mismo cuando hables de tus habilidades o hables de su compañía como si ya trabajaras allí. Una cosa es segura: no encontrarás el trabajo soñado si no te esfuerzas y lo intentas. Identifica lo que quiere, concéntrese en tus puntos fuertes, investiga un poco y sal con la confianza de que el trabajo de tus sueños ya es suyo.